A través del espejo

El frío cubre nuestras ventanas;
pensando en el amor, que,
lento, llena de sueños nuestras miradas.

El invierno nos inunda y
sentimos palpitar el fuego,
que enternece lo que toca.

Brota lento entre los dos,
tímido como el viento,
apasionado como el trueno.

Nace para nunca morir,
mimado como un cachorro,
silencioso pero se hace sentir.

Así es nuestro amor, sincero.